El equipo de debate del IES Miguel Servet integrado por Mario Alins, Aurora Berdún y Juan Pérez-Sevilla ha participado este fin de semana en el torneo celebrado en el centro educativo Zalima de la ciudad de Córdoba. La cuestión a debatir era si son necesarios los exámenes para evaluar a los alumno. Nuestros alumnos se enfrentaron a tres grupos en las rondas preliminares y tras ganar los tres, pasaron a los cuartos de final; de ahí a la semifinal, y por último a la final: perdieron frente a los campeones en un debate ajustadísimo en el que a los nuestros les tocó defender la postura en contra, quizás su posición más fuerte por lo original de sus argumentos y y de su enfoque ético y humanístico.
Segundo puesto, o sea, campeones. Esperar el debate, comenzar el debate, sortear los posturas, conocer a los rivales, oir el debate de otros, todo, todo genera nervios, inseguridad y miedo. Sin embargo nuestros alumnos aguantaron las seis rondas, sin desperdiciar segundos, sin quedarse en blanco, sin dudar de su valía hasta que acabó todo. Fueron campeones en pundonor y en elegancia al ganar y al perder.
El debate es un espacio donde ejercer el arte de la oratoria, o sea, de persuadir a través de la palabra, de convencer al auditorio usando argumentos. En muchos centros escolares de España empiezan a crearse aulas de debate, generalmente como actividad extraescolar, con objeto de desarrollar esta herramienta de enorme valor pedagógico. No es el caso del IES Miguel Servet, que cuenta con un grupo de alumnos entusiastas que se preparan y ensayan solos, y cuyos profes son animadores y admiradores. El centro, por su parte, les ofrece la organización y el marco para debatir, oportunidades para participar en torneos y una formación mínima.
La participación en este debate no estaba prevista pero cuando la organización nos invitó, el grupo de trabajo del Proyecto Lingüístico de Centro animó al equipo a asumir el reto pues pensó que esta sería una buena forma de premiar a los alumnos que con tanto esfuerzo y generosidad habían participado en los primeros debates del Servet. Debemos agradecer al centro su apoyo humano y económico para organizar el viaje.
… Y en Córdoba hacía un tiempo excelente, y estaba la Mezquita, el puente sobre el Guadalquivir, la plaza del Potro, el Alcázar de los Reyes Cristianos, la judería, la sinagoga, el museo arqueológico, la calle del Pañuelo, los naranjos en flor, las calles empedradas, el salmorejo, las berenjenas, y los cordobeses.
